Adiós Paquito, gracias por tanto

[Paquito en su hábitat natural (?)]

Tres derrotas, tres empates, una derrota. Seis puntos, nueve goles en contra, apenas cuatro a favor y el aunteúltimo puesto del torneo. Todos estos números desembocaron en la partida del gran Francisco Arcos del Luch-Energia . El español le dijo adiós a Vladisvostok después de más de 4 años en el club, cuando había llegado como preparador físico. El detonante fue el empate sin tantos ante el pobre Fakel de Voronezh.

Después de la época dorada de la Premier y el regreso a la primera división, "Paquito" terminó ganándose el puesto de DT tras asumir interinamente y salvar al equipo de descender en la temporada pasada. El nuevo campeonato lo encontró afianzado en el banco del Tigre del Oriente: programó una pretemporada intensa y solicitó varios refuerzos. Pero los resultados no lo acompañaron.

Es sabido que finalmente, de los jugadores que llegaron, pocos fueron los que él había pedido. La relación con los dirigentes se fue desgastando con el correr de los partidos, y según se informa en la web oficial del Luch, la resición del contrato fue de mutuo acuerdo. Pero la sensación que queda es otra: 7 partidos en un torneo de 38 es poco tiempo para medir el trabajo de un entrenador, que llegaba con el espaldarazo de gambetear un descenso tras haber agarrado un fierro caliente post debacle de Leonid Nazarenko.

Pero no todas son pálidas en la Fortaleza del Este. Ni lerda ni perezosa (?), la dirigencia del Luch se movió rápido y abrochó el regreso de Sergei Pavlov, DT que ascendió al conjunto de Vladisvostok a la Premier y lo mantuvo allí durante algunos años enfrentando de igual a igual a la mafia moscovita. "No voy a ocultar nada, ya tengo todo acordado, y viajaré inmediatamente. He trabajado en esa ciudad, ahí se respira fútbol y estoy feliz de regresar. Hay un buen equipo y sé lo que tengo que hacer para sacarlo adelante", indicó Pavlov a Sports.ru.

Más allá del regreso de un histórico, el ambiente en FDV es de tristeza. "Llegué a Vladivostok en marzo de 2007. El mar estaba helado, pero me gustó. En Rusia te esperas otra cosa porque oyes hablar de mafias, de prostitución... Yo encontré un enclave bonito, con mar, cines, bares, casas más pequeñas, pero bien acondicionadas... No hay lujos y el nivel de vida es más bajo que en España, pero el día a día no es diferente", le dijo en diciembre del año pasado al periódico español El País.

El alicantino quedará en la memoria de los que seguimos al Luch como un técnico cultor del perfil bajo, trabajador y humilde. Características poco comunes en el fútbol actual. Chau Paquito, gracias por haber hecho tanto con tan poco.